unusual wall art

Bellamente hecha a mano de jade y estuco, esta audaz escultura replica una máscara descubierta en la antigua ciudad maya de Tikal. Se encontró en la Tumba 160 y data del año 527 d. C. Tales máscaras se colocaban en los entierros para que las usara el espíritu del difunto rey en su viaje por el inframundo. Exquisitamente elaborada por Rubén y Gilda Pérez, la réplica del museo llega con un soporte de exhibición de latón y madera de pino, y también se puede exhibir en la pared.

En lo profundo de la selva tropical de Campeche, en el sur de México, se encuentra la antigua ciudad maya de Calakmul. Su símbolo era una serpiente. De Rubén y Gilda Pérez, esta elegante escultura reproduce una máscara que representa al gobernante del siglo VI, Garra de Jaguar. Los artesanos trabajan en jade y estuco en una ardua labor que demora unos siete días en completarse. La réplica del museo llega con un soporte de exhibición de latón y madera de pino, y también se puede exhibir en la pared.

Coronada por nenúfares, una bella princesa tiene capullos de loto por ojos. Esta elegante máscara balinesa está magníficamente tallada a mano. De Eka, resalta las inusuales vetas de la madera natural de hibisco. Esta madera varía mucho en sus tonos y patrones, por lo que cada máscara es una obra de arte absolutamente única.

Se cree que Jizo, una deidad amada en el panteón budista, protege los espíritus de los niños que han fallecido. Eka en Bali presenta esta maravillosa estatuilla, con el estilo de las esculturas tradicionales de Jizo que generalmente están talladas en piedra. Está tallado en madera de hibisco, que tiene una coloración y una veta inusuales.